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Alguien llama, algo llama nadie responde sólo los latidos que no se completan porque siento que me ahogan... es mi mente? son todas las emociones en mi cabeza? me queda espacio? al menos para reír? queda algo más que vomitar? por qué hay tantas cosas que no puedo arreglar empezando por mi silencio... mi aislamiento Toda la niebla de este cuerpo descendiendo en la tormenta en un rito que se repite cada noche que no puedo más No estoy aquí no te oigo no te abriré la puerta no vas a escuchar mi voz al otro lado del teléfono no voy a responder no hay una razón para entrar aquí. No te sirve seguir bebiendo de mí hace tanto que estoy deshidratada pero sabes que también soy carne también soy hueso soy alma soy algo más que tu bar clandestino sé que algún lugar deje mis prendas, no puedes introducirte a mis pasadizos a mi refugio es lo

Lo chistoso es que la historia empieza en el "popradio, para divinos y divinas", el mismo lugar donde siempre terminamos . El mismo lugar donde terminan muchas bocas solas y ebrias después de cruzar tantas avenidas y de que el trafico no los haya partido en dos ni en tres. Ese lugar siempre da sed... la sed de un baile, de baños que se vuelven locos... dije locos? locas! de sed por colillas, por un rouge y de un escenario. Entonces la noche cuenta que ese par de piernas estaba tirado sobre la mesa y hace rato bebía un vaso vacío... como la canción de los cadillacs que tanto te gusta, me acerque a su vestido lleno de lentejuelas, me miró a los ojos y me pidió que la acompañara ... dije la? era lo! y por qué tenía que acompañarla, si ella estaba tan ebria, tan curva y divina como siempre, pero fue la vida la que nos junto en la mesa, porque la vida es de esas que se sube a los escenarios y no puedes dejar de mirarla o de querer aferrarte a ella, y así obtuvo lo que quería