P
Lo más cercano a una amiga de infancia que alguna vez tuve fue P. En verdad a P no la conocí hasta los 13, pero tuvimos muchos cambios de casa y de ciudad y eso dificultó bastante tener y mantener amistades. Me acuerdo que P me renombró shibi porque suena similar a un diminutivo de mi nombre. A mí no me gustaba mucho, pero estaba acostumbrada a qué me renombraran y me terminé adaptando, en verdad, no tenía otra opción. Este apodo se popularizó y me acuerdo que P se enojó porque era algo exclusivo de nosotras, además le caían pésimo mis nuevas amistades y sí me tomó un tiempo, pero P tenía razón. Con P siempre pude ser yo misma e increíblemente sigue ahí aún sabiendo como soy yo misma, ahí, toda rota. Nunca me juzgó y si tenía que decirme algo, me lo decía sin anestesia, me putea bonito, digo bonito porque siempre termina en risa o dándome la manito, más cerca de una manito de marihuana, pero manito al fin y al cabo. Por cosas de la vida, vivió un tiempo muy corto conmigo y fue tan