Querida E,
Fuimos muy amigas y eso nunca se olvida, yo me equivoqué y tú lo hiciste, pero crecimos. Hoy te volví a ver y estabas hermosa. Y me emocioné y tú igual lo hiciste y después de abrazarte como hace tiempo no lo hacía sentí como si nunca nos hubiésemos separado y en un rato estábamos los tres riendo como solíamos hacerlo. Y te escuchaba hablar y no importaba a veces lo que saliera de tu boca, porque lo único que me importaba era volver a tenerte cerca, porque te extrañé, pensaba en ti de cuando en cuando. Y me alegra saber que después de todo floreciste. Porque a veces hace frío y miraba la noche y me acuerdo que más de alguna vez estuvimos juntas mirando las estrellas, y ese recuerdo lo tendré siempre.